Fuente | Pedro Reinoso
El camerino del Expreso Austral se hartó de esperar. Mediante un comunicado público, los jugadores del Deportivo Cuenca confirmaron que el club mantiene una deuda de dos meses de salario (julio y agosto) y que, de no existir solución inmediata, podría haber paralización de actividades.
El plantel dio un ultimátum claro: la dirigencia tiene plazo hasta la noche de este lunes, 8 de septiembre, para regularizar los pagos. Aun así, dejaron un gesto de profesionalismo: viajarán y jugarán el duelo de Copa Ecuador ante Aucas, pero advirtieron que la paciencia tiene límite.
El reclamo pone nuevamente sobre la mesa la fragilidad económica de varios clubes de LigaPro. Mientras la hinchada pide transparencia, los futbolistas exigen lo más básico: cumplir contratos.
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