No fue una goleada, pero sí una declaración de principios.
Independiente del Valle se impuso 1-0 a Imbabura y sigue con paso firme en la Copa Ecuador.
Con gol de Yandry Vásquez —producto de una jugada colectiva quirúrgica—, los de Javier Rabanal sellaron el pase a octavos.
¿La clave? Solidez, jerarquía… y cantera. Porque este IDV, una vez más, puso a los jóvenes y no se notó.
Saben a lo que juegan, saben cómo jugarlo. Y lo hacen en todos los frentes.
Ahora esperan rival: Vinotinto o Gualaceo. Y cuidado, porque cuando este equipo toma ritmo, no lo para nadie.