Fuente | Óscar Portilla
El empate en Paraguay dejó dos fotos muy distintas.
De un lado, Sebastián Beccacece celebra: primer punto en la historia de Ecuador en Asunción, invicto de 10 fechas, boleto al Mundial 2026 sellado y una de las mejores cosechas de puntos de la Tri fuera de casa.
Del otro, la prensa y la afición se preguntan:
– ¿Cuántos partidos más sin marcar?
– ¿Por qué tanta contención y tan poco riesgo?
– ¿Por qué insistir con un Preciado de “taponador” y no con más filo ofensivo?
El técnico defiende el plan: bloque sólido, juego intenso, pragmatismo. La crítica responde: “faltan ideas y hambre de gol”. Y, en el fondo, ambas posturas contienen verdad:
– La eliminatoria es brillante en números: clasificación temprana, carácter fuera de casa, orden y personalidad.
– El ataque preocupa: cuatro partidos sin gritar gol, delanteros sin peso, transiciones que pierden filo.
